“De pequeña me prometí a mi misma… No convertirme en una mujer que pasa todo el tiempo en la cocina. No quería convertirme en esa mujer sin alguna esperanza de vida, que viste malísimo y sin una gota de maquillaje”
Es increíble como pasa rápido el tiempo, y te das cuenta cuando llegas a esa línea que separan los 30’s del resto de las próximos años venideros.
Sé que es imposible parar el tiempo que llevas contigo y convertirte en “señora”.
A lo largo de mi vida, he escuchado tantas cosas sobre cómo llegar a esta edad, ¡la edad en la que se supone que has alcanzado el máximo grado de madurez!
.. bah, como si yo fuera una fruta! (Que cosa extraña, no?)
Y donde todas las personas se sienten libres para juzgar y decir lo que yo debería (como siempre) haber hecho antes de llegar al 39.
De las nuevas responsabilidades, de cómo vestirme, comportarme, tener hijos, ser una ama de casa ejemplar deprimida y vivir en completa angustia durante siglos … amén
Pero la pregunta es: “¿Pero quién diablos te dijo que quiero una vida así?”
Me di cuenta de que todas esas reglas son impuestas por una sociedad en decadencia, una sociedad que sabe muy poco de las mujeres.
Todo esto me hace sentir como si estuviera sentado en la antesala del infierno.
Seguramente esta no es la vida que quiero o que pienso vivir, de hecho, ¿quién diablos te dijo que quiero una vida así?
Durante muchos días, meses para ser precisas, me detuve a pensar en todo lo que hacía ruido en mi cabeza, que me hacía sentir como si estuviera en medio de un tráfico con todo el increíble ruido de los autos al mediodía, con ese smog. que sale del escape y del calor que sube del asfalto. ¡Me sentí sofocada!
— Asfixiante, verdad?
Una noche decidí detenerme un momento y disfrutar de mi noche de verano … y tenía muchas cosas en que pensar. Entonces tuve este sentimiento y me pregunté: “¿Soy solo yo quien se siente así?” Y como soy fan de Instagram, decidí echar un vistazo a la vida de algunas mujeres de mi misma edad … pensé que Podría ser una buena idea mirar a través de sus ojos.
Y lo que descubrí fue más hermoso de lo que podría haber esperado.
-He visto algunas mujeres hermosas, fuertes, que no tienen miedo en mostrarse como son, mujeres que trabajan para un físico espectacular, sin vergüenza y culpa alguna, por romper el esquema de la mujer de 39 y algunas con más de 40’s
Mujeres que se aceptan y se muestran al mundo tal como son.
Mujeres que se visten con estilo propio, sin importar las criticas.
¡Vi mujeres felices!
Luchando por sus sueños, porque todos somos libres de soñar!
En ese momento me sentí libre de gritarle al mundo quién soy, que no soy perfecta y que amo ser quien soy.
Los 39’s no solo será la última vez que pueda decir que estoy en los 30 y … algo. También son el comienzo de la suma de experiencias, juventud y libertad;
Eso nos permite mostrar nuestra esencia, una época maravillosa en la que somos dueños de nuestros propios pasos y conscientes de dónde queremos llegar.
Para mi fue una bocanada de aire fresco!
Somos libres de decidir cómo hacer nuestras vidas,
Libres para ser felices, para disfrutar de nuestro cuerpo.
Libres para mostrarnos como somos, con celulitis, estrías y esos kilos de más que nos hacen humanos y reales.
Libre para trabajar para un físico de en sueño y mostrarlo sin ser culpa alguna.
Libres de decidir tener hijos o no.
Y libres de tenerlos sin esclavizarnos.
Libres para cerrar capítulos innecesarios en nuestras vidas.
Libres para ser endiabladamente seductoras y libres de ser libres!
Así que: Bienvenidas a los 39’s!
